Chistes gallegos graciosos

Un gallego compra un boleto para viajar en bus.
Al otro día se monta en él y es el único que va a viajar. Ya en el camino empieza a llover y hay una gotera justo sobre el asiento de él.

 Entonces el chofer le dice: ¿Por qué no cambia de puesto? Y el gallego le responde: -Pero, ¿con quién?

Un gallego va a tomarse unas fotos de estudio y le dice al encargado del establecimiento:
 -Yo tengo dos hijos, una esposa que me engaña, mis padres están muertos, estudié medicina y me gusta el beisbol.
El fotógrafo le responde: -Caramba, pero usted ¿Por qué me cuenta eso?
 El gallego responde: -Porque allá afuera dice "Revele su 'rollo' y Reclame un Estuche para la Cámara".

Un gallego llega a un restaurante y el mesonero le pregunta: -Señor, ¿vino de la casa?
Y el gallego le responde: -No, del trabajo

Adivinanza gallega:
¿Qué es verde por fuera, verde por dentro y con una pepa de palta en el centro?

Estaba una señora en el paseo del lago, mirando al lago y le pregunta a quien estaba al lado, que era gallego: -Señor, ¿será que ese lago es muy profundo?
 -Pues yo no creo, porque mire donde les da el agua a los patos.

Después de un terremoto un amigo gallego se encuentra con otro y le pregunta: -¿Sufrió mucho tu casa? -No, se cayó inmediatamente.

El pintor .
Un gallego visita la casa de sus vecinos argentinos y le pregunta al dueño de casa si tiene algo para arreglar o reparar, ya que necesita un poco de dinero.
 El hombre le dice: - Cuanto me cobrás por pintar el porche?
El galleguito responde: - ¿Qué le parecen.... 100 euros??
 El tipo, muy de acuerdo con el precio, le da la pintura, la escalera, las brochas, etc.
 Al rato la esposa del hombre le comenta: -¿Sabrá él que tiene que pintar el techo también? .... ¿por qué no vas a ver cómo lo está haciendo? .... mirá que es gallego..... y hacen muchos chistes sobre ellos...
.El hombre no le presta atención.
Al rato suena el timbre. Es el gallego que le dice:
-Ya terminé con el trabajo y limpié los pinceles.... como tenía pintura extra le di dos manos y guardé todo en el garaje.
El argentino, sorprendido, saca dinero de su bolsillo y paga lo convenido, y le agrega 10 euros de propina. El gallego le agradece y al ir retirándose, se da vuelta y dice: - .. Ah! ... y no es un Porche ............. es un Toyota

Buen hijo.
 Dos gallegos se encuentran en la calle. Uno de ellos iba caminando con su anciana madre. Y el otro le dice: -¡Hombre, cuánto tiempo! ¿Qué es de tu vida?
-Pues... aquí estoy con mi madre, la pobre se ha quedado sorda y ciega.
¡Carambola! ¡Qué mala suerte! ¿Y... la llevas ahora al médico?
-No, no, voy a que le corten la luz y el teléfono.